Yo viajo a los espacios transparentes. Conmigo está tu chal de lana, el viejo fonógrafo que cuidabas tanto, tus zarcillos con que ibas al mercado, tu pulsera de oro, la vajilla humilde. El perro que nos despertaba pasa su hocico por mi lecho. No es magia, sencillamente nada he olvidado a no ser que existo sin ti.
Una urbe áspera sella mi boca.
ResponderEliminarYo viajo a los espacios transparentes.
Conmigo está tu chal de lana, el viejo fonógrafo que cuidabas
tanto,
tus zarcillos con que ibas al mercado, tu pulsera de oro, la vajilla
humilde.
El perro que nos despertaba pasa su hocico por mi lecho.
No es magia, sencillamente nada he olvidado a no ser que existo
sin ti.
Rafael Cadenas
(Una isla)